Patricia Vázquez ha emprendido en México una cruzada para evitar que las niñas dejen la escuela. Vázquez, que cuenta con un doctorado en educación por la Universidad de Harvard con la mirada puesta en la primera infancia, es la primera mujer en 18 años en dirigir Mexicanos Primero, una organización que impulsa desde el sector privado mejoras en las políticas educativas en México, un país cuya economía ocupa el puesto 15 en el mundo, pero con grandes retos en materia educativa. El rezago afecta principalmente a las niñas y adolescentes, que deben enfrentarse a una cultura machista, que las obliga a quedarse en casa, y a un sistema público que no les ofrece garantías mínimas, como una infraestructura decente o el reparto gratuito en las escuelas públicas de productos de higiene femenina. De estos retos conversa con entusiasmo Vázquez en esta entrevista y aporta soluciones para convertir a la escuela en un lugar “que genera oportunidades para que todos los chavos de este país terminen su trayectoria”.Pregunta. México tiene altos niveles de deserción escolar: de cada 100 estudiantes que ingresan en la primaria solamente terminan la media superior 67. Y esto afecta más a las niñas. ¿A qué se debe?Respuesta. El propósito de garantizar el derecho a la educación, y específicamente al tema de aprender, tiene que ver con que todas las niñas, niños y jóvenes en edad escolar estén en la escuela. Durante la pandemia, y creo que fue muy notorio, se iban más de la escuela las mujeres, porque eran las que tenían que quedarse en casa, porque tenían que apoyar en los cuidados de los hermanos. Hay todavía una lógica establecida de que las mujeres están hechas para seguir estando en casa y que las oportunidades son más para los hombres. Todavía tenemos un larguísimo trecho para lograr que las mujeres puedan culminar su trayectoria escolar completa.P. Usted ha impulsado iniciativas como apoyar a las adolescentes de México con la menstruación, para qué no dejen la escuela. ¿Cómo las afecta en su proceso educativo?R. Tenemos todavía una gran cantidad de escuelas que no tiene sanitarios, en las que no hay agua potable, que no tienen recursos e insumos para el periodo menstrual. Otro tema interesante tiene que ver con quién acompaña a las niñas en la escuela, a quién acuden las chicas, porque casi siempre es un hombre el que les da una toalla sanitaria. Todavía hay un largo trecho para reducir la pobreza menstrual en las escuelas.P. ¿Hay avances?R. Es increíble que estemos planteándonos todavía a estas alturas ese tema. Imaginemos las comunidades indígenas o las comunidades mucho más alejadas, donde claramente hay otro tipo de escasez, donde esto afecta la dignidad de las chavas y se sienten muy desplazadas. Las chavas pueden perder hasta un mes de clases porque se ausentan durante su periodo. La menstruación, en lugar de ser una condición que tenemos todas las mujeres, que además es muy natural, afecta el aprendizaje y promueve inasistencias, un rezago escolar enorme, y puede causar el abandono de la escuela.P. ¿Qué proponen ustedes?R. Hicimos el análisis de las 32 entidades en el país. Revisamos cuál de ellas tiene legislación que promueva o se hable de la pobreza menstrual. Lo que estamos promoviendo es que se incrementen las iniciativas en los congresos locales. Buscamos a mujeres que están gobernando los Estados para que se apropien de la iniciativa. Tal es el caso de Ciudad de México, que ahora está promoviendo una iniciativa para que se visibilice el tema. Hacemos las iniciativas, se las proponemos, las dialogamos con ellas y cada quien empieza a abrazar el tema.Una niña en su salón de clases en una escuela secundaria del Puerto de Acapulco, en el Estado de Guerrero, en una fotografía de archivo. Marco Ugarte (AP)P. ¿En qué consisten sus iniciativas?R. En garantizar insumos, si se puede de manera gratuita, para al menos las poblaciones más vulnerables. Garantizar las condiciones de infraestructura, sanidad en las escuelas, para no afectar su proceso de aprendizaje. Sonora es uno de los Estados que más avances tiene. Afortunadamente, tenemos Estados donde lo vieron como un problema público, porque además es lo que nosotros siempre decimos: Es un problema de salud pública que afecta la educación. Estamos dialogando incluso con presidentes municipales, sobre todo en ciudad de México, para que destinen recursos. Queremos que las estudiantes en las escuelas se sientan en un contexto seguro y que los directores, titulares y los padres se apropien del tema.P. Han publicado un informe sobre las relaciones de pareja dentro de las escuelas. Una de cada 4 mujeres de 15 a 19 años que ha tenido una pareja, ha experimentado violencia en su relación. ¿Se aborda este tema en las escuelas?R. En el caso de Violencia en el noviazgo revisamos los marcos de convivencia escolar ¿Cuántos de los 32 Estados tienen la alerta de género? 19. De esos, tres no han avanzado. Nosotros llegamos a este tema por la tristísima historia de Ana María, una chica de 18 años que murió hace año y medio víctima de feminicidio, en manos de su expareja. La mamá ha sido muy activa en las redes sociales y decidió crear esta fundación, Fundación Ana, con el objeto de sensibilizar, informar y anticipar cuando suceden ciertos signos en las relaciones, sobre todo de los adolescentes.P. ¿En qué se está fallando en la escuela?R. Creo que le hemos pedido mucho a la escuela y concretamente a las maestras y maestros. Les hemos pedido que identifiquen el tema de la obesidad, del sobrepeso, el bullying, violencia, pero que también identifiquen cuando hay algún tema de droga, adicción. Le estamos pidiendo a la escuela que sea mucho más que centros de aprendizaje. Las maestras y los maestros han hecho un enorme trabajo para responder ante las necesidades de todo mundo. En el caso de la violencia lo que ha fallado en la escuela pública es que no lo hemos visto como un tema integral: quienes rodeamos a la escuela nos tenemos que sentar y decidir cómo convertirla en un espacio que genera oportunidades para que todos los chavos de este país terminen su trayectoria; un lugar seguro, un espacio digno, donde me respetan, donde nadie me invade. Creo que el tema principal es la visión que tenemos sobre la escuela. La escuela no es un centro de soluciones de problemas inmediatos, es un espacio que forma a los ciudadanos.

Patricia Vázquez: “Hay chavas que pueden perder hasta un mes de clases porque se ausentan durante su menstruación”
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