Mónica Naranjo está de vuelta: “No quiero morir en un escenario. No soy tan artista” | Gente

No hay en el mundo nadie más frágil que ella. Pelo acrílico, cuero y tacón. Maquillaje hasta en el corazón. No hay en el mundo nadie más dura que ella. Mónica Naranjo (Figueres, 50 años), cantante, compositora, productora, presentadora, reina del pop, musa del colectivo LGTBIQ+, icono feminista, diva y “chica mala”, entre otras cosas, cumple tres décadas de carrera y lo celebra con Greatest Hits Tour, una gira en la que repasa su trayectoria e interpreta sus grandes éxitos: Sobreviviré, Desátame, Solo se vive una vez, Pantera en libertad…La artista acaba de volver de México y Estados Unidos, donde ha cantado ante más de 50.000 personas. Ahora se prepara para la siguiente fase de su gira, en los meses de octubre, noviembre y diciembre, en la que actuará en Sevilla, Murcia, Málaga, Valencia, Madrid y Barcelona. Naranjo es todo lo que se puede esperar de una diva. Le han reservado la planta entera de un hotel en el centro de la capital para esta entrevista. Llega tarde, con una pequeña corte, porque está en plena promoción, pero en cuanto aparece en escena uno se olvida de la espera. Es cálida y fría, cercana y misteriosa, frágil y dura.Más informaciónPregunta. Treinta años de carrera y nunca ha querido escribir sus memorias ni hacer un documental sobre su vida. ¿Por qué?Respuesta. Tengo la costumbre de olvidarme de cada cosa que hago. Te voy a dar un ejemplo. Me acuerdo perfectamente de cuando presenté La isla de las tentaciones. Me acuerdo de todo lo que sucedió en la isla, pero en el momento que me fui, lo di por cerrado.P. ¿No le gusta pensar en el pasado?R. Es que ya se ha vivido. Lo ideal en esta profesión es seguir aprendiendo y creciendo y no vivir en el pasado. Si quieres seguir en este trabajo, no puedes dejar de evolucionar.P. Tampoco suele dar entrevistas. Le gusta alimentar cierto misterio. ¿Es una estrategia?R. No, es mi manera de vivir el negocio. La mejor manera de exponer mi vida es haciendo buena música.P. Ha creado una imagen de mujer poderosa, fuerte, imbatible. ¿Alguna vez el personaje se comió a la persona?R. No. Cuando era más joven, ese personaje era necesario porque estaba muy sola. Me fui a México muy jovencita y sola y esta industria es muy complicada. Ese personaje me arropaba, era mi lugar seguro. Ahora ya no lo necesito. Pero en su momento fue algo muy valioso. Me ayudó mucho a mi confianza, a mi seguridad, a mi autoestima.”Soy consciente de todo lo que he conseguido, pero nunca es suficiente”, dice Mónica Naranjo. Jaime VillanuevaP. Es hija de padres andaluces que emigraron a Cataluña. ¿Qué opina de que Junts ahora quiera imponer el conocimiento del catalán a los nuevos inmigrantes?R. Yo soy la primera generación de catalanes en mi familia. Estamos en una sociedad en la que se ha olvidado la cantidad de gamas de grises que hay. Lo estamos polarizando todo y eso es una pena. Cuando tú radicalizas algo, te alejas de la verdad. Cuando me preguntan sobre esto, yo siempre digo lo mismo: la política nos está separando. Parece mentira que no hayamos aprendido nada. Conozco la historia por mis abuelos, porque forman parte de esa generación que levantó este país. Y todo lo que me han contado para mí es cátedra.P. ¿Se refiere a la generación que sufrió la Guerra Civil?R. Sí. Son los verdaderos cracks, es esa generación de titanio, como yo la llamo.P. Es un icono para la comunidad LGTBIQ+ y un referente del feminismo. ¿Por qué cree que hay mujeres que todavía no comprenden a las mujeres trans?R. A ver, para mí una mujer trans es una mujer. Lo que tú sientas en tu corazón a mí me vale. Fin de la historia. Estamos hablando de un colectivo que ha sufrido tanto… Si algo nos diferencia a las mujeres es la misericordia. Y nos hemos olvidado de ella.P. Tuvo que triunfar fuera para después triunfar en España. ¿Seguimos sin tratar bien a nuestras leyendas?R. Yo creo que los tiempos de Dios son perfectos. He aprendido a fluir en estos años. Soy de las que siempre muerdo y no suelto el cacho. Y eso es un error porque te empecinas en que ese es el camino y al final te das cuenta de que no. En el momento en el que sueltas, y dejas todo en manos de la vida, sucede la magia.P. ¿Cuál es el mayor bulo que se ha dicho sobre usted?R. Yo tiendo a reírme sobre los bulos. Se dicen muchas cosas sobre mí. Si me conocieran, igual les caería bien.P. Pero usted cae muy bien.R. ¿Sí?P. ¿No lo cree?R. No, sí, yo siento la bondad y la generosidad del público. Pero hay personas que me han visto en los reality shows y en los talents y que pueden pensar que soy excesivamente recta. Si es que al final lo que te hace crecer es seguir el camino angosto.Mónica Naranjo y Àngel Llàcer se abrazan durante la grabación de un programa de ‘Tu cara me suena’ en 2014.Europa Press Entertainment (Europa Press via Getty Images)P. No se ve con los mismos ojos a una mujer que sabe lo que quiere que a un hombre decidido.R. Yo nunca he sentido eso. El problema es que se cree que la rectitud es un gesto masculino y no lo es. Se llama hambre, se llama propósito en la vida.P. Antes hablaba de su paso por la tele como presentadora de realities. ¿Está viendo esta edición de La isla de las tentaciones?R. No la veo. Yo la tele no la veo. No la veo porque no me gusta lo que veo. Me afecta mucho. La información es importante, pero el equilibrio también. Te voy a poner un ejemplo. Hay guerra en Ucrania o en Gaza, pero no me la muestres porque me haces polvo. Me quita años de vida. Ya sé que existe, pero no me enseñes imágenes. No las quiero ver. Ya sé lo que conlleva la guerra: destrucción masiva.P. ¿Qué tiene que tener un programa de tele para que diga que sí?R. El reality de parejas mola mucho. Repetiría, por supuesto. La pareja es un gran desafío. Yo lo veo siempre con mis amigos. Cuando me dicen que llevan 40 años juntos, les pregunto: “¿Cómo se hace?”. La mayoría de esas parejas me responde: “La cesión”. Hay que saber ceder.P. Como reina del pop, ¿qué nuevos artistas le gustan?R. ¿Reina del pop? ¿Sí? Wow. No lo sabía. Si ahora mismo echáramos marcha atrás y eso se lo dijeras a mi profesor en el conservatorio, fli-pa-rí-a. Yo vengo del clásico, lo que pasa es que al final me torcí.P. Entonces, ¿qué artistas del pop le gustan?R. A mí me gusta el artista que es muy artista. Una Billie Eilish me parece una artista muy artista.P. ¿Y de España?R. Abraham Mateo está haciendo unas cosas divinas. Es un gran intérprete y un gran compositor. Amaia también me parece que es maravillosa. Está haciendo unas producciones divinas y tiene mucho talento. Amaia es muy auténtica. No hace música para vender. Hace la música que ella siente y por eso llega, porque es auténtica.”Yo soy de las que siempre muerdo y no suelto el cacho. Y eso es un error porque te empecinas en que ese es el camino y al final te das cuenta de que no”, asegura Mónica Naranjo. Jaime VillanuevaP. Al principio de nuestra charla decía que no piensa en el pasado. ¿Qué quiere hacer en el futuro?R. Me quedan muchas cosas. Una de ellas es agradecer. Es importante en la vida agradecer y no lo hacemos suficiente. Hay un dicho que dice: “Pide una vez y agradece mil”.P. Pero usted es consciente de todo lo que ha conseguido.R. Sí, soy consciente de todo lo que he conseguido, pero nunca es suficiente. Si mañana dejo la música, me podría considerar un ser realizado. Si mañana lo dejara, diría: “Vaya viaje. Lo he conseguido, lo he logrado. Tu hambre te ha llevado a lo que tú querías hacer”. No todo el mundo puede decir que se va de este mundo realizado. Pero siento que me quedan muchas cosas por hacer porque soy muy joven.P. ¿Cambiaría algo de estos 30 años de carrera?R. No, no cambiaría ni una coma porque todo fue necesario para curtirme y para llegar hasta aquí. Hay personas que siempre intentan elegir el camino fácil. Ese es un gran error. Eso no te curte. Los que cogemos el camino difícil siempre vamos a seguir, aunque nos tiren un mar de lava. Ya hemos estado en el infierno y sabemos lo que hay.P. ¿Cuál ha sido el momento más difícil?R. Abandonar la música en el auge de mi carrera fue lo mejor que pude hacer. No estaba presente. Y para crear, para hacer cosas, tienes que estar presente. Cuando no estás presente, todo el mundo manda sobre ti. Y eso es muy peligroso. Por eso abandoné el barco. Estuve siete años sin cantar y no lo eché de menos.P. Entonces no tiene miedo a bajarse del escenario.R. Me acuerdo de que en esa época me llamaba Rocío [Jurado] y me decía: “Naranjito, ya, ¿no?”. Yo le decía: “Es que no soy como tú. No soy tan artista como tú”.P. O como Raphael, que siempre dice que quiere morir sobre un escenario.R. Y lo hará.P. ¿A usted le gustaría eso?R. No, yo no quiero morir en un escenario. No soy tan artista.