En semanas pasadas se dio a conocer que Rodrigo “N”, mejor conocido como el doctor RAQ, fue sentenciado a varios años de prisión por sus prácticas negligentes y falsarias, que le costaron la vida a varios pacientes.

De acuerdo con una investigación realizada por Octavio Arroyo (Mr. Doctor) en su canal de YouTube, el Dr. RAQ se ostentó como cirujano plástico en un consultorio de Querétaro, el cual alcanzó notoriedad en la ciudad por atender a varios miembros de la socialité y la farándula local.

Incluso, en un reportaje de la revista TVyNovelas, la actriz Karla Sofía Gascón promocionó a este falso cirujano y afirmó que todos los procedimientos de rejuvenecimiento que se realizó para aparecer en el filme Emilia Pérez fueron hechos por el doctor RAQ.

A pesar de la fama que este farsante llegó a tener, en el Registro Nacional de Profesiones no aparece ninguna cédula a su nombre que lo avale como cirujano plástico, aunque sí cuenta con cédulas de la Licenciatura en Medicina General, la cual estudió en la UNAM.

Entre las acusaciones en su contra están múltiples casos de negligencia médica que habrían causado la muerte de más de siete personas y dejado secuelas irreparables en otras.

Durante años, el Dr. RAQ logró evadir la justicia mediante acuerdos económicos con sus víctimas. Sin embargo, en esta ocasión no pudo librarse de las autoridades, quienes lo detuvieron hace tres semanas.

Hechos vergonzosos como este ponen en riesgo de criminalización a médicos que ejercen su profesión con honestidad y ética.

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