António Guterres, secretario general de la ONU, está viviendo desde Sevilla “en primera persona” la “nueva normalidad” en la que una parte considerable del planeta se ha adentrado debido al cambio climático causado por las emisiones de gases de efecto invernadero que genera el ser humano, principalmente, con la quema de los combustibles fósiles. “El calor extremo ya no es un fenómeno raro: se ha convertido en la nueva normalidad”, ha advertido a través de sus redes sociales el máximo responsable de Naciones Unidas.Guterres está en Sevilla para participar en la Conferencia sobre Financiación para el Desarrollo de la ONU, de la que España es anfitriona y que reunirá a unos 70 jefes de Estado. Desde que en 2017 inició su mandato al frente de la ONU, el cambio climático, que golpea con mayor intensidad a la población de los países más vulnerables, ha ocupado un lugar destacadísimo en la agenda del político portugués. Sus advertencias sobre el derrotero que ha tomado la humanidad debido al calentamiento son constantes. “El planeta se está volviendo más caliente y más peligroso: ningún país es inmune”, ha recalcado desde Sevilla, donde ha pedido más ambición a los Gobiernos en esta lucha. La batalla contra el cambio climático es una de la más globales a la que se enfrenta la humanidad. Ninguna nación, como dice Guterres, es inmune, no hay un rincón que no esté afectado. Pero hay áreas que están en la zona roja, como es el caso de España. Porque la región mediterránea padece un incremento de los impactos del calentamiento, por ejemplo, en forma de eventos extremos. Las olas de calor como la que está golpeando a España desde el sábado y que ha pulverizado ya varios récord de temperaturas —y que está sufriendo Guterres en sus propias carnes en Sevilla— se están volviendo más duras y habituales de la mano del calentamiento global. Además, cada vez son más tempranas. Solo hay que recurrir a los datos históricos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) para comprobarlo: solo 11 de las 75 olas que esta agencia tiene contabilizadas desde 1975 en la Península se iniciaron en junio. Este episodio extremo, que se espera que se concluya el martes, está dejando un reguero de récord de temperaturas. El sábado se superaron los 40 grados Celsius en más de un centenar de estaciones de la red de Aemet; y se alcanzaron los 46 en El Granado (Huelva), la más alta registrada en España en junio. El domingo, según también los datos difundidos por la agencia, se superaron los 44 en localidades de Badajoz, Huelva y Sevilla. El calor continuará este lunes. Aemet advierte, además, de que la noche será dura en muchas zonas del país: la próxima medianoche se superarán los 32 o 34 grados en zonas del nordeste, centro y sur de la Península, así como en el sur de Gran Canaria.Esta ola se produce también en un junio que será récord en España. Porque cerrará como el junio más caluroso de la serie histórica de Aemet, que arranca en los años sesenta del siglo pasado. Otro signo más de la “nueva normalidad” que está viviendo Guterres en Sevilla.

La advertencia de António Guterres desde Sevilla: “El planeta se está volviendo más caliente y más peligroso” | Clima y Medio Ambiente
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